Lowell.- La Asociación Carnavalesca de Massachusetts se ha consolidado como un pilar cultural en la representación del carnaval dominicano en la región de New England. En una reciente entrevista con Stelvyn Mirabal, presidente de la asociación, destacó el origen de este proyecto, que comenzó con un pequeño grupo de amigos y familiares, quienes representaban la ciudad de Santiago de los Caballeros en desfiles dominicanos, inicialmente en la ciudad de Lawrence.
Con el tiempo, la participación creció, incluyendo representantes de diversas provincias dominicanas, como La Vega, Santo Domingo, San Francisco de Macorís, y Sancedo. Fue entonces cuando decidieron cambiar el nombre, que antes se llamaba Comparsa Familia Mirabal, y nació la Asociación Carnavalesca de Massachusetts, un grupo diverso que representa el carnaval dominicano en su máxima expresión.
Este carnaval, que es una de las festividades culturales más importantes de la República Dominicana, no solo celebra la herencia y el folklore del país, sino que también une a las comunidades en el extranjero. La asociación tiene sedes en Worcester y Rhode Island y está conectada con grupos carnavalescos en Nueva York y en Santo Domingo, lo que refuerza su papel como un centro cultural clave para los dominicanos en el noreste de Estados Unidos.
Las caretas y los trajes
Entre los personajes más destacados que forman parte del grupo están los tradicionales "roba la gallina", figuras populares que siempre aportan un toque de humor y tradición al desfile, también "los diablos cojuelos", clalifé, entre otros personajes qua por el carnaval dominicano de la isla han sido declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
El arte de hacer caretas, una parte esencial del carnaval, ha sido aprendido y perfeccionado por los mismos miembros de la asociación. De hecho, el hijo de Stelvyn Mirabal, Leonardo Mirabal, quien es el director ejecutivo, ha comenzado a dar clases sobre la confección de estas caretas, comenzando con las más pequeñas y avanzando a tamaños más grandes.
La asociación ha importado muchos de los trajes desde la República Dominicana, aunque algunos han sido confeccionados localmente. Este proceso ha permitido mantener viva la esencia auténtica del carnaval dominicano, a la vez que fomenta la transmisión de habilidades artesanales entre generaciones.
José Miguel García, vicepresidente de la asociación, es otro pilar importante. Es oriundo de San Francisco de Macorís. Todos ellos trabajan en conjunto para preservar y promover esta rica tradición, fortaleciendo el sentido de identidad y orgullo entre los dominicanos de Massachusetts y más allá.
El carnaval dominicano no solo es una fiesta de colores y disfraces, sino una manifestación cultural que honra la historia y el espíritu de resistencia del pueblo dominicano. Celebrado anualmente en febrero, este evento tiene sus raíces en el siglo XVI y combina elementos de las culturas africana, indígena y europea, reflejando la compleja identidad del país.
La entrevista con Silvyn Mirabal, presidente de la Asociación Carnavalesca de Massachusetts, tuvo lugar durante la presentación de la asociación en el Latinx Festival el pasado sábado en Lowell. Este evento brindó una plataforma para que la comunidad conociera más a fondo el trabajo de la asociación y su misión de preservar y difundir la cultura dominicana a través del carnaval.
La participación en el festival fue una oportunidad clave para que la Asociación mostrara de su esencia, destacando la diversidad de sus miembros y el esfuerzo colectivo por representar el carnaval dominicano en Estados Unidos.
Sobre los personajes y sus trajes
Los trajes de los personajes del carnaval dominicano son una explosión de color, creatividad y tradición, y cada uno tiene un simbolismo particular que representa distintos aspectos de la historia y cultura dominicana.
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